Durante la primera semana de marzo han llegado a Barcelona unos 100.000 visitantes para asistir al Mobile World Congress (MWC-2025).

Cualquier evento con una elevada concentración de personas tiene un efecto importante en el espacio donde se celebra. Actos como grandes festivales de música y conciertos, partidos importantes de futbol o eventos deportivos masivos, ferias y congresos aportan importantes beneficios económicos directos e indirectos sobre el territorial donde actúan, pero también suponen impactos ambientales y sociales.

En el caso del MWC, desde hace años, la organización dispone de un programa para gestionar y minimizar los efectos negativos en áreas clave de su actividad: energía, producción y residuos, alimentación y agua potable, logística, desplazamientos y alojamientos.

En esta línea, desde MWC Barcelona ya hace 10 años que funciona la plataforma «Donation room» que gestiona las donacions de los materiales usados durante el congreso. En 2024, se organizó durante seis días la recogida y distribución de mesas, armarios, sillas, muebles y enseres del hogar como lámparas, vajilla, papeleras, etc. Esta acción evitó que cinco toneladas de materiales casi nuevos se convirtieran en residuos y que muchas entidades sociales obtuvieran un beneficio.