Un estudio llevado a cabo por investigadores del Grupo de Investigación en Patología Molecular y Terapia de Enfermedades Heterogénicas y Poligénicas del Instituto de Investigación Biomédica del Parc Científic de Barcelona (IRB-PCB) descifra el comportamiento de una proteína que tenemos en nuestras células llamada Mitofusina-2, y concluye que podría constituir una nueva diana terapéutica para el tratamiento de la resistencia a la insulina. Los resultados se han publicado en la revista Human Molecular Genetics.

Asimismo, ya era conocido que mutaciones en esta proteína son causantes de la enfermedad crónica llamada Charcot-Marie-Tooth (CMT) que afecta a los nervios periféricos, es decir, aquellos que sirven de enlace entre el sistema nervioso central y la periferia, y que se manifiesta en una de cada 2.500 personas. En el contexto de esta enfermedad, el estudio también aporta nuevas pistas sobre los mecanismos que funcionan defectuosamente en las persones que están afectadas.

Par regular la obtención de energía, las células disponen de diferentes mecanismos, algunos de los cuales son todavía desconocidos. El estudio, llevado a cabo por los investigadores Antonio Zorzano, Sara Pich y Manuel Palacín, entre otros, se ha centrado en algunos de estos mecanismos de regulación de emergía y ha podido demostrar la vinculación de la Mitofusina-2, en la regulación de les funciones de las mitocondrias, orgánulos que juegan un rol esencial en la regulación de la energía de las células. Utilizando cultivos celulares, se ha puesto de manifiesto el comportamiento de las mitocondrias cuando la proteína actúa en mayor o menor intensidad demostrando que cuando la proteína actúa en menor intensidad, el consumo de algunos substratos como la glucosa disminuye; mientras que cuando actúa en mayor intensidad, la oxidación de la glucosa se ve incrementada. El artículo describe también la naturaleza de estos mecanismos.

Al relacionar estos resultados con otros que el grupo había publicado anteriormente, en los que ya se demostraba que las personas que presentan resistencia a la insulina tienen menos cantidad de proteína Mitofusina-2 en la musculatura, el estudio confirma que la proteína podría ser una bona diana terapéutica para el tratamiento de esta enfermedad.

De hecho, el Grupo de Investigación ya había patentado, en febrero de 2003, la Mitofusina-2, dado que los resultados obtenidos hasta entonces ya apuntaban que podría tratarse de una nueva diana terapéutica, pero no ha sido hasta la obtención de los resultados actuales que los investigadores han visto confirmada su hipótesis. El siguiente paso será la validación de esta diana en un modelo animal.