Un estudio muestra como las variaciones climáticas afectan el desarrollo de epidemias en enfermedades como el cólera
Un equipo internacional de investigadores, entre los que se encuentra el climatólogo Xavier Rodó, responsable del Laboratorio de Investigación del Clima del Parc Científic de Barcelona, muestra en un estudio como las variaciones climáticas, en determinadas circunstancias, afectan la dinámica de una enfermedad infecciosa. En este estudio se ha desarrollado un modelo matemático que permite describir la dinámica del cólera i mejorar la predicción de posibles brotes epidémicos. Los resultados de este estudio se publican esta semana en la revista Nature.
Muchas enfermedades infecciosas como el cólera, la malaria i el dengue, siguen ciclos anuales, a la vez que presentan también una variación interanual, por ejemplo hay años en que la enfermedad tiene una incidencia más elevada i desarrolla epidemias i otros en qué las incidencias son inferiores a las habituales. Estas dinámicas temporales de las enfermedades infecciosas dependen tanto de factores internos, como la evolución demográfica de la población, sus características sociales, la proporción de individuos inmunes o las políticas sanitarias y las campañas de vacunación, así como de factores externos ambientales, por ejemplo los climáticos. Evidenciar la relación entre los factores climáticos y la dinámica de la enfermedad, difícil de medir de manera cuantitativa hasta el momento, es uno de los objetivos de la investigación llevada a cabo por este grupo de investigadores.
En este estudio se presentan los resultados de integrar ambos tipos de factores, la variabilidad climática y las variaciones de la inmunidad de la población, en una sola ecuación que permita explicar tanto la dinámica habitual de enfermedades como el cólera, es decir su ciclo anual, como las variaciones interanuales de estas. Este modelo se ha desarrollado a partir de una ecuación anterior elaborada para describir la dinámica del cólera en el Subcontinente Indio, pero que es extrapolable a otras regiones y enfermedades de dinámicas similares.
El estudio se ha realizado con una serie temporal de datos climáticos recopilados durante los últimos cuarenta años en la población de Metlab (Bangladesh). Los resultados obtenidos han sido una elevada correlación entre las variaciones interanuales de la transmisión de la enfermedad y los patrones climáticos de las lluvias monzónicas, el caudal del río Brahmaputra, las inundaciones en Bangladesh y la temperatura superficial en la Badía de Bengala, así como con el fenómeno conocido como «El Niño» (ENSO), que rige la dinámica climática interanual. Asimismo, demuestra, que para el caso del cólera, que la idea existente hasta el momento de que el control climático de la enfermedad era ejercido desde los ambientes costeros, es incorrecta. De los resultados obtenidos, los investigadores concluyen que el efecto climático va ligado a las situaciones extremas. En este sentido, los años demasiado secos y cálidos provocan la concentración de personas cerca de las escasas masas de agua, mientras que la combinación de lluvias torrenciales y ríos desbordados provocan inundaciones que destruyen o alteran los sistemas de distribución de agua potable. En ambas circunstancias se daría una proliferación bacteriana significativa y aumentaría, por lo tanto, la probabilidad que el patógeno y las poblaciones humanas, sometidas ya a un estrés considerable, estén en contacto.
Este nuevo modelo incorpora el clima como factor determinante en la dinámica de estas enfermedades de manera que permite estudiar como se produce este forzamiento climático, pero abre también, las puertas a una posible mejora en la predicción de las epidemias permitiendo anticipar los posibles efectos de la variación climática sobre a emergencia o re-emergencia de determinadas enfermedades infecciosas con dinámicas parecidas a la del cólera.